Metosuximida

compuesto químico

La metosuximida es un fármaco anticonvulsivo derivado de la succinimida con efectos similares a la etosuximida.[1]

Metosuximida
Nombre (IUPAC) sistemático
1,3-dimetil-3-fenilpirrolidina-2,5-diona
Identificadores
Número CAS77-41-8
Código ATCN03AD03
Código ATCvetNo adjudicado
PubChem6476
DrugBankDB05246
Datos químicos
FórmulaC12H13NO2 
Peso mol.203.2371 g/mol
Datos clínicos
Nombre comercialCelontin®
Uso en lactanciaModeradamente seguro. Usar solo si el beneficio potencial justifica el riesgo potencial para el bebé. (en todos los países)
Cat. embarazoEvidencia de riesgo para el feto, aunque el beneficio potencial de su uso en embarazadas puede ser aceptable a pesar del riesgo probable solo en algunas situaciones. Queda a criterio del médico tratante. (EUA)
Estado legalDescontinuado en la mayoría de países (MEX)
Vías de adm.Vía oral

Descripción

Es un polvo cristalino blanco a blanco grisáceo. Es inodoro o tiene un ligero olor. Soluble 1 en 350 partes de agua, 1 en 3 partes de alcohol, 1 en menos de 1 parte de cloroformo y 1 en 2 partes de éter. Debe almacenarse en contenedores herméticos.[2]

Usos

El fármaco fue comercializado en 1956 para las crisis de ausencia (petit mal) tanto en adultos como en niños.[1]​ También tiene cierta actividad en las convulsiones parciales complejas, aunque existen reportes de que es menos tolerado que la etosuximida[2]​ y, por lo general, solo se administra a pacientes que no responden a otro tratamiento antiepiléptico.[3][4]

Metabolismo

El fármaco es metabolizado rápidamente por las enzimas microsomales a un derivado N-desmetilado, N-desmetilmesuximida.[2]​ La vida media plasmática es menor a dos horas, mientras que la del metabolito N-desmetilmesuximida es de unas 40 horas. Este metabolito, dada su larga latencia y acumulación puede causar somnolencia.[5]​ El principal metabolito detectado en perros es la 2-metil-2-fenilsuccinimida,[6]​ mientras que en humanos es 3-metil-3-fenilpirrolidina-2,5-diona (α-metil-α-fenilsuccinimida), que es el metabolito activo.[7]

Efectos secundarios

La metosuximida posee efectos secundarios semejantes a los de la etosuximida, entre los que se incluyen problemas gatsrointestinales. Así mismo, se ha obervado depresión severa, erupción cutánea, fiebre, edema periorbitario, leucopenia, anemia, nefropatía y hepatotoxicidad.[1]

Uso en embarazo y lactancia

Se reportó uso de la metosuximida durante el primer trimestre en solo cinco embarazos. No se encontraron pruebas de efectos adversos en el feto. La metsuximida tiene un potencial teratogénico mucho más bajo que la clase de anticonvulsivantes de oxazolidindiona. Los anticonvulsivantes derivados de la succinimida deben considerarse de elección para el tratamiento de las crisis de ausencia el primer trimestre. Su clasificación es C.[8]

En lactancia

No hay datos disponibles, aunque otros compuestos de la misma familia se han empleado.[8]​ Si el tratamiento fuese inevitable, la decisión de amamantar debe tomarse individualmente y se debe observar al bebé para detectar síntomas tales como succión débil, vómitos y cansancio. Cuando hay una sospecha de efectos secundarios, se debe determinar la concentración en el suero del bebé y se debe tomar una decisión con respecto a si se debe agregar fórmula para reducir la transferencia de drogas a través de la leche materna, o se debe destetar al bebé.[9]

Referencias